Una utopía no es el final de un camino simplemente, a la utopía realizada se llega mediante lucha eterna, bajo la mano de la mano del sembrador que no vera el fruto de su cosecha.
A una Utopía se llega con la incesante lucha de los que estuvieron antes de nosotros, y de nosotros mismos, colaborando con la causa de tantos otros como nosotros, con ideales tales como los nuestros,
La utopía se conquista, como cada día se hace con el pan, el trabajo para consumir, y esto para vivir, para trabajar, como escuche alguna vez.
¿Por qué recuperar lo que la tierra le dió a todos por igual, y unos se apropiaron de la libertad, de la tierra misma, del pan, el aire, el agua, y le robaron lo suyo a los que habían logrado aprender a compartir lo que se les había dado.
Pero el que quiera recobrar su dignidad, es su deber temer a la mano de los que sirven a los dueños el mundo?
Tantas veces el límite se ha evadido, y propiedad de algunos, han llegado a ser humanos, que bestial actitud de los amos del dinero y de nuestras vidas.
Quien es el que se atreve a decir que la esclavitud acabo con el colonialismo europeo...ahora se llama imperialismo económico, personas que trabajan para el enriquecimiento de los que ya son ricos. Contratos, en los que se pierden los derechos. Trabajar por los hijos e hijas, para que estos concluyan siendo esclavos del patrón, del estado, y los Imperios actuales, entre los cuales se destaca completamente los EE.UU. Es esta la vida que nos ha tocado elegir, para clasificarnos según el tamaño de nuestras casas, el modelo de los autos, el poder del papi, la riqueza material de la familia, y cuantas amistades falsas se cuente en la agenda telefónica...
Es tiempo de recobrar lo que nos pertenece, la tierra es de todos y todas, por lo que debemos trabajar unidos, y apoyándonos solidariamente.
Buscar nuevos caminos para vivir, buscar valores, entre las cenizas del dinero víctima del fuego de las antorchas populares.
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